-Hermes Vladimir Batres Osorio / LA HUMANIDAD DEVIENE –

En el primer artículo, identificamos al acto educativo como un objetivo social que debe ser coordinado por la ciencia pedagógica. En la ciencia es común utilizar el concepto de paradigma como un marco regulatorio aceptado por la comunidad científica. La pedagogía hereda este concepto de las ciencias naturales, sin embargo, el significado de paradigma ha venido desvirtuándose en la pedagogía, efecto creado por los sectores hegemónicos y por algunos teóricos que adoptan la instrumentalización del hecho educativo. Continuemos…

Una teoría inicialmente puede concebirse como la solución a uno o varios problemas, pero esto no constituye un modelo regulatorio, incluso puede encontrarse alternativas dentro del mismo paradigma. Ningún experimento se desarrolla sin elementos teóricos que prueben o refuten sus resultados, pero en ese momento son especulativos.

En 1972, Kuhn orienta la posible confusión:

El investigador es un solucionador de enigmas, no alguien que ponga a prueba los paradigmas. Aunque durante la búsqueda de la solución de un enigma particular puede ensayar una serie de métodos alternativos para abordar el problema descartando los que no le dan los resultados deseados, al hacerlo no estará poniendo a prueba al paradigma. En lugar de ello, será como el jugador de ajedrez que, frente a un problema establecido y con el tablero, física o mentalmente ante él, ensaya varios movimientos alternativos para buscar la solución. Esos intentos de prueba, tanto si son hechos por el jugador de ajedrez como si los lleva a cabo el científico, son solo pruebas para ellos mismos, no para las reglas del juego (p. 225).

Cuando un paradigma logra su madurez, borra al antecesor, porque este carece de validez, las nuevas prácticas en ciencia utilizan el nuevo paradigma para sus teorizaciones. En el caso de la pedagogía, el paradigma del constructivismo aún no ha sido superado, ni se niega que probablemente este paradigma entre ya en crisis. Pero ¿Acaso tenemos los pedagogos y docentes, un marco regulatorio nuevo, que sustituya por completo el anterior? Y de pensar en que sí lo tenemos, ¿cuál o cuáles?

Un paradigma no es una cuestión ecléctica en donde se pueden tomar pedazos, porciones del paradigma anterior, como se pretende sugerir en la siguiente cita: “Históricamente, las competencias han surgido en la educación como una alternativa para abordar las falencias de los modelos y enfoques pedagógicos tradicionales, como el conductismo, el cognoscitivismo y el constructivismo, aunque se apoyen en algunos de sus planteamientos teóricos y metodológicos” (Tobón Tobón & Pimienta Prieto, 2010, p. 3).

El autor de La estructura de las revoluciones científicas tuvo una clara concepción al respecto de las cuestiones eclécticas:

La transición de un paradigma en crisis a otro nuevo del que pueda surgir una nueva tradición de ciencia normal, está lejos de ser un proceso de acumulación, al que se llegue por medio de una articulación o una ampliación del antiguo paradigma. Es más bien una reconstrucción del campo, a partir de nuevos fundamentos, reconstrucción que cambia algunas de las generalizaciones teóricas más elementales del campo, así como también muchos de los métodos y aplicaciones del paradigma (Kuhn, 1971, p. 139).

La cuestión sobre el paradigma fue aclarado ampliamente por Kuhn. Por otro lado, cabe también un análisis en la postura de Tobón y las competencias, porque en principio hay que aclarar y enfatizar que las competencias no nacen en el seno educación, de la pedagogía o de la filosofía de la educación, como sí lo pretende hacer creer Tobón, quien débilmente lo expone, como se vio ya en los párrafos anteriores. El inicio de las competencias y su praxis está plenamente identificado en la psicología, principalmente con un enfoque laboral, posteriormente fue utilizado por el sector empresarial, sobre todo en Europa, como una respuesta rápida a la crisis económica de los años 80. Desde luego, nuestra visión de orientar el acto educativo es distinto a la del autor citado, porque cada autor se autogobierna o se cosifica, “Los dominadores mantienen el monopolio de la palabra, con que mistifican, masifican y dominan” (Freire, 1970, p. 17).

La construcción de un paradigma en pedagogía se desarrolla por las investigaciones embrionarias, las cuales pueden desembocar en un modelo o en un enfoque. Justamente sucedió así con el constructivismo pedagógico, considerado como un paradigma, así tal definición es aceptada en principio porque tiene un constructo teórico que los sustenta le da vitalidad. Entre los autores teóricos se pueden ubicar a: Piaget, Vygotsky, Ausbel, Bandura, Bruner Novak, Gardner entre otros. La aceptación del constructivismo pedagógico como paradigma por el sector docente es de momento fuerte, pues aunque en la práctica pura se pueden observar manifestaciones conductuales, en realidad son muy pocos los docentes que no se consideran constructivistas, sobre todo los docentes jóvenes. ¡Ahora todos somos constructivistas!

El paradigma del constructivismo pedagógico inició con varias teorías, posteriormente se convirtió en una corriente, logró su etapa de maduración en un modelo, finalmente se concibió en un paradigma. Como se puede apreciar entonces, un paradigma en pedagogía conserva sus etapas, tal cual lo se hace un paradigma en las ciencias naturales. Necesita periodos de desarrollo, de reflexión, de maduración y aceptación, de ninguna manera es una afirmación o una utilización vacía del concepto.

Por otra parte, existen otras categorías dentro de la pedagogía que pueden constituirse incluso en etapas o fases evolutivas para convertirse posteriormente en un paradigma, esto depende de las soluciones que se presenten al hecho educativo, y la aceptación de la comunidad de pedagogos y docentes. Estas categorías pueden ser: enfoques, modelos, corrientes y tendencias.

Continuará.

Bibliografía:
Aldana Mendoza , C. (2001). Pedagogía general crítica. Guatemala: Serviprensa
Batres Osorio, H. V. (libro inédito). Evaluación de los aprendizajes en las TIC.
Freire , P. (1997). Pedagogía de la autonomía . Madrid, España: Siglo Veintiuno Editores
Kuhn, T. (1971). La estructura de las revoluciones científicas. México: Fondo de Cultura
Morin, E. (2010). Complejidad restringida, complejidad general. Estudios 93, vol. III
Pimienta Prieto, J. H. (2012). Las competencias en la docencia universitaria preguntas frecuentes. México: Pearson Educación México.
Pozo Yépez, M. A. (2009). Teorías del aprendizaje, guía didáctica. Ecuador: Editorial de la Universidad Técnica Particular de Loja.
Schunk , D. H. (2012). Teorías del aprendizaje. México: Pearson Educación.
Tobón Tobón, S. & Pimienta Prieto, J. (2010). Secuencias didácticas: aprendizaje y evaluación en competencias. México: Pearson Educación.

Fotografía tomada de When we were yung there was a war.

Hermes Vladimir Batres Osorio

Investigador independiente, entusiasta por naturaleza, inscrito en el humanismo como la preocupación legítima por el otro y de su dignidad, amante de la filosofía, creyente en las luchas sociales, comprometido con la pedagogía crítica, defensor de la educación laica y liberadora, movido por los invisibles, interesado por el pensamiento latinoamericano y la cosmovisión de los pueblos originarios.

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