Cachetada para las castas anticomunistas

-Aura Cumes / RU CHUQ’A QATZI’J (LA FUERZA DE NUESTRA PALABRA)

Como ha sucedido cada vez que sienten amenazado su excesivo poder, las castas anticomunistas, responsables del genocidio en este país y fundadoras del partido de gobierno, echaron nuevamente a andar sus siniestras estrategias: rumor, miedo, confusión y mentira. A través de ridículos videos y escritos en las redes sociales, han querido hacer creer que la solicitud de retiro de antejuicio contra el presidente Morales forma parte de un complot, de una conspiración de golpe de Estado orquestado por los “resentidos comunistas” que quieren llegar al poder, porque no lo han podido hacer a través de partidos políticos. Incluso la forma de sus videos y la música que utilizan deja ver que se quedaron varados en el tiempo.

Estas mismas castas anticomunistas que se han dedicado a desprestigiar a la Cicig y al MP, retorciendo a su conveniencia la idea de soberanía nacional, que han venido fomentando un estúpido nacionalismo y han criticado hasta la saciedad a la cooperación internacional que no les apoya a ellos, han recibido una bofetada tras otra en estos últimos días. Y no es que sus caducas ideas no hagan eco en la sociedad, existe gran cantidad de personas que van repitiendo por todos lados sus rumores, esto es así porque tienen el control de iglesias evangélicas y católicas, canales de televisión y emisoras de radio, cuyo objetivo es evitar que exista un pueblo crítico y consciente que los desenmascare. Pero hay que decir que periodistas y analistas de los que son sobreconsultados todos los días, hasta hace muy poco variaron su punto de vista, porque pensaban muy parecido a las castas en mención. El punto que ha hecho aquí la diferencia es que, frente a tanta evidencia, ya no solo generada por la Cicig y el MP, sino por los mismos medios de comunicación, los rumores pierden peso.

Lo que me interesa aquí es enfatizar el poder que tiene el rumor para paralizar el pensamiento crítico sobre la realidad y sobre las formas en que opera el poder, principalmente cuando se usan artefactos que la sociedad tiende a rechazar. “Allí viene otra vez el comunismo”, “la guerrilla nos quiere gobernar, ya tiene tomado el Ministerio Público”, “los extranjeros nos vienen a gobernar”, eran expresiones que escuché de mucha gente que apoyaba, hasta hace tres semanas, incondicionalmente al presidente Morales. Si escarbamos un poco, ese es el mismo rumor que causó el genocidio en este país. Miles de personas y comunidades enteras pasadas por las más crueles formas de muerte, acusadas de comunistas mediante el artefacto macabro del rumor. Así encubrieron su turbio poder las sangrientas castas anticomunistas y así lo siguen haciendo sus descendientes directos. Solo que esta vez no tienen el apoyo de los gringos anticomunistas, como en el pasado, cuando entregaron la soberanía nacional que ahora absurdamente invocan.

Lo que esta lucha contra la corrupción está desnudando, no solo son los mecanismos de saqueo del Estado, sino sobre todo permite reafirmar qué clase de élites económicas y políticas le han dado forma al Estado-colonial que tenemos. Es bien sabido que en este país hay mucho más que comunistas y anticomunistas, pero la táctica de demonizar todo lo que es ideológicamente contrario es el caldo de cultivo que los sostiene, por eso no es nada extraño que ahora llamen “terroristas” a quienes se manifiesten contra la corrupción, lo mismo que han hecho con las organizaciones indígenas, campesinas y de mujeres que desde hace mucho los cuestionan. Finalmente, diré que a lo que verdaderamente temen estas élites es a un pueblo crítico y consciente, porque solo ello permitirá evidenciar sus turbios intereses, como ha pasado en estos últimos días.

Aura Cumes

Maya Kaqchikel. Vindico el pensamiento crítico y la palabra enérgica como vehículos para poner al desnudo los poderes que dan forma a la realidad de despojo que marca la vida de las mujeres y de los Pueblos Indígenas. Asumo como principio ético y político el cuestionar y desafiar toda forma de dominación. Gran parte de mis esfuerzos los he centrado en la lucha contra el racismo y el sexismo, los cuales comprendo como problemas producidos por dos grandes sistemas de dominación fusionados en la historia de Guatemala:el colonialismo y el patriarcado.

Ru chuq’a qatzi’j (La fuerza de nuestra palabra)

0 Commentarios

Dejar un comentario